Pizza de pollo marinado

¿A quién no le gusta la pizza?

Aquí os traigo una riquísima pizza de pollo marinado que he hecho hoy por primera vez en mi vida. Sabrosa, jugosa y ligeramente picante, con la base comprada en el supermercado es muy fácil de hacer y merece la pena, os lo aseguro. Probadla y ya me contaréis.

INGREDIENTES

Pechuga de pollo

1 base de pizza

Salsa de tomate y/o tomate frito

Queso rallado de vuestro preferido

Miel

Mostaza

Pimentón dulce

Curry

Orégano o albahaca

PREPARACIÓN

Cortamos las pechugas de pollo en tiras. Con una pechuga tenéis para dos pizzas de este tamaño, como medir cantidades no es lo mío, lo que sobró se lo dejé a mi hermano para que se hiciera unas fajitas de pollo –que por cierto con este aliño estaban también de vicio-.

Mezclamos la miel, la mostaza, el pimentón y el curry en un bol y dejamos marinar las tiras de pollo unos 10 minutos.

Precalentamos el horno y mientras, formamos la pizza: echamos un par de cucharadas de tomate y extendemos sobre la base. Añadimos el queso rallado –al gusto- y seguimos con las tiras de pollo y un poquito del marinado. Por último espolvoreamos el orégano o la albahaca (yo aproveché que mi planta sigue viva y corté un par de hojitas de albahaca fresca).

Horneamos a 180 °C hasta que el pollo esté cocinado y el queso fundido.

Servimos.